Me vuelves loca con un gramo de tu dulzura y en donde quizás busco ese
un quizá y en donde posiblemente un beso, una riña y un hasta luego.
Porque eres mi deseo de mujer por tener ese gran hombre que eres tú; y
siempre diré de por vida al ver el bailar de tus ojos que hablan y que
al mismo tiempo calla tu boca, y tu cuerpo; mientras que los giros de mi
cuerpo cantan un te quiero, y te amo
con la locura y pasión que puede existir. Porque eres dentro de mí una
rey del corazón, la príncipe de todas mis mañanas y un dulce en mi boca,
que es tu beso, que es tu sexo, es tu imagen y mil palabras que dan
vida a un sueño, del que no despertaré hasta dejar de respirar; porque
te mereces mi vida y en este poema te la ofrezco; ya que tú eres la
dueño de mi corazón, de mi cuerpo; tú eres la gran hombre de mi vida....
Flor Jiménez.
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