Respirar a
veces cuesta tanto, que duele el alma.
Un día descubrí
que algo que hacemos tan inconscientemente tiene su importancia cuando
realmente te hace falta .Que es tan sencillo y tan simple como aprender a
inhalarlo con la pureza y la sencillez que el alma te lo permita, quieras o
sientas.
Todos deberíamos
de aprender a ser más condescendientes con
nosotros mismos ,más permisivos ,menos egoístas respeto a nuestros y sus
sentimientos ,para cuando entre ese aire en nuestros pulmones y pase por
nuestra sangre y llegue al alma ..no duela.
Quizás lo
veamos complicado o simplemente nosotros compliquemos nuestra existencia buscando
tramas inexistentes, conductas malas que a la larga envenenan el aire que
respiramos y las hacemos habituales en nuestra existencia…quizás de vivirlas
habitualmente no nos damos cuenta que no son buenas.
En el momento
en que respiramos y nos damos cuenta que ciertas actitudes no son buenas e
intentamos mejorarlas mediante el sentimiento que abarca el alma para mejorar
nosotros y mejorar lo que hacemos, no permitimos que ya nadie entre en nuestra
alma sino es para mejorarla, perdonamos dentro de nuestro dolor y pedimos
perdón ,estamos mejorando el aire que respiramos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario